Alguna vez has reaccionado ante alguna circunstancia de forma desmedida. Sin pararte a pensar, dejándote llevar por los resortes ancestrales de nuestro cerebro reptiliano: El peligro que tengo enfrente lo puedo derrotar, ataco. O este me puede, huyo. Solo haciendo uso de nuestra parte animal más antigua.
Te has parado a pensar que si coges un vaso de agua muy caliente y te quemas los dedos de la mano, lo sueltas, sin preocuparte si se rompe o no. Pero si en vez de ser un vaso de agua. Lo que coges es un brillante que vale un millón de dólares, aunque te quemes no lo soltarás.
Aquí tenemos en juego los cerebros reptiliano, límbico y el más joven, el neocortex. En el primer caso el del vaso de agua, solo actuó el cerebro reptiliano. En el segundo, el reptiliano cree que puede con el peligro, el límbico con su control de emociones y sentimientos, pasa una valoración de la situación y el valor del brillante al neocortex. Este último cortacircuita la respuesta de las amígdalas y hace que un nervio del antebrazo, no responda, evitando la caída y rotura del brillante.(Goleman)
Pues ahora que ya te has dado cuenta del funcionamiento de los componentes básicos del cerebro, ha llegado el momento que te des cuenta que el que tiene el control de todo ese entramado es uno mismo. Tú eres el que se encuentra detrás de los pensamientos, el que tiene la capacidad para organizarlos y para discernir sobre los mismos: estos pensamientos son tóxicos; quejarse, juzgar a los demás y a uno mismo, criticar, encerrarse en darle vueltas y vueltas a un tema durante demasiado tiempo, cuando este en si mismo ya hace tiempo que ha caducado. Esto es añadir un sufrimiento inútil a la vida. Y estos otros son salud: Alegría, positivismo, racionalidad, ecuanimidad, la bondad, la compasión, la empatía. Por lo tanto:
CONTROLA TUS PENSAMIENTOS PORQUE ESTOS PRODUCEN TUS PALABRAS.
CONTROLA TUS PALABRAS PORQUE ESTAS PRODUCEN TUS ACCIONES.
CONTROLA TUS ACCIONES PORQUE ESTAS PRODUCEN TUS HÁBITOS.
Y CONTROLA TUS HÁBITOS PORQUE ESTO CREAN TU VIDA.
Agradezco vuestros comentarios, me ayudan a aprender y a crecer
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