martes, 13 de abril de 2021




 

LA SENDA DEL BIENESTAR INTERIOR

              La ofuscación, la avidez y otros impedimentos de la mente.

 

Los impedimentos y oscurecimiento de la mente son numerosos: la ofuscación, la avidez.

1º. LA OFUSCACIÓN

              1º.Es la ausencia de claridad mental y de visión lúcida. Inclina al apego y a la aversión, produce aferramiento a ideas y opiniones erróneas, y conduce a magnificar lo trivial y minimizar o banalizar lo esencial. Frustra la comprensión clara y distorsiona el discernimiento. Sus antídotos son la visión clara y la lucidez.

2º. LA AVIDEZ

              Es el deseo compulsivo, la avaricia, el afán de posesividad y el apego. Se  produce al surgir una sensación placentera, genera en la persona afición y dependencia desproporcionada. El antídoto es el desapego, la comprensión clara y la ecuanimidad.

Se trata de un deseo compulsivo sin límites, inherente a la vida, que no supone un problema si sabemos relacionarnos con él de modo tal que ni los reprimamos ni nos esclavice (hay que vivirlo con lucidez y ecuanimidad). El problema real es la codicia, una cualidad mental: de dinero, de poder, de amigos, de contactos sexuales, de fama, de prestigio, de destacar.

La represión viene dada casi siempre por factores del inconsciente. Los deseos son reprimidos por falsos conceptos morales, esquemas o filtros socio-culturales, modelos familiares, frustraciones y miedos.

Se puede encauzar con conciencia y lucidez, y también es importante aceptar que no todos nuestros deseos y expectativas van a cumplirse (ésa es una ilusión infantil). No debemos dejarnos llevar por la frustración y el resentimiento.

Cuando alcanzamos la claridad mental necesaria, nos damos cuenta que la avidez es una trampa y que provoca mucha insatisfacción y dolor. La avidez impide la generosidad, la tolerancia, la visión correcta, la compasión y la indulgencia; frena el desarrollo de nuestra cualidades más hermosas y nos priva de la tranquilidad y la felicidad. El apego siempre causa miedo: a perder lo que tenemos, a que un ser querido nos abandone, a que esta agradable situación cambie… Y como el apego es una actitud mental, la mente se empeña en coleccionar, acumular, poseer.

La meditación es un medio muy eficiente para superar apegos y aversiones. Asimismo, aun no siendo apta para hipocondríacos, es muy importante la meditación y el recordatorio sobre la muerte, que ayuda a eliminar los <<ñoños>> estados de ánimo, a disipar las mezquindades, a apreciar más la vida y el arte de ser, y a amar más a seres que podemos perder en cualquier instante o ellos nos pueden perder a nosotros. Leemos en el Ramayana:<< Rodando sin tregua, noche y día decaen las vidas de los mortales, al igual que los rayos ardientes del sol estival merman los siempre decreciente arroyos. Cuando los hombres descansan en su hogar, la muerte reposa también a su lado; cuando día tras día salen, la muerte les acompaña en su camino; la muerte va con ellos cuando vagan errantes; la muerte está con ellos cuando están en su hogar.>>

El apego excesivo impide la salud menta y emocional. El apego invierte toda nuestra energía en afanes mundanos y no nos deja que utilicemos una parte en progreso interior. Tanto nos inclina a metas externas, que no apreciamos las internas.

En tanto que actitud mental nociva, surge de la ofuscación o de la ignorancia. La meditación es también un poderoso antídoto contra el apego. El Dhyanabindu Upanishad explica: <<Alta como una montaña, larga como mil leguas, la ignorancia acumulada durante la vida sólo puede ser destruida a través de la práctica de la meditación: no hay otro medio posible.

Su antídoto esencial es la generosidad.

 

Transcrito: Paco Costa

Terapia Espiritual

La Senda del Bienestar interior (Ramiro Calle)

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por vuestros comentarios y aportaciones a los temas tratados.